Miércoles 16 de Octubre de 2002
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Carrier y Asoc.
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11 de octubre de 2002 - Año I - n° 18
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Cada uno por su lado (como Tupac Amaru): Revisando las principales iniciativas nacionales destinadas a promover el uso de las TIC llegamos a la siguiente conclusión: no son intenciones ni iniciativas las que faltan. Es más, podría decirse que en algunos casos hay sobreabundancia de ellas, a punto tal que varias se superponen en sus objetivos y otras no pasaron de un bonito documento en Word (o StarOffice, ya que en el Estado se usa también software libre). Uno de los problemas es que existen diversas áreas del Estado Nacional con iniciativas propias, evidenciando la falta de coordinación entre las mismas. Por ejemplo, el portal Nacion.ar tiene objetivos superpuestos con el de gobiernoelectronico.ar. Y así se podría seguir enumerando casos.

Si este fuera el único problema, no sería tan difícil de solucionar. Pero a esto se suma que en muchos casos hay un buen trabajo en cuanto al diseño de estas iniciativas, pero no tanto en la gestión de las mismas. Así, llegamos a que sólo el 40% de los CTC (Centros Tecnológicos Comunitarios) mantienen sus puertas abiertas, mientras que entre los otros, hay muchos "desaparecidos". También está el caso del Proyecto Argentina Digital (conocido como el plan del millón de PCs), que sólo logró su objetivo en un 4% (o sea, se vendieron 40 mil PCs en vez de un millón). La lista es más larga, pero estos ejemplos alcanzan.

Dicen que el camino al infierno está pavimentado con buenas intenciones. Quizás no habremos llegado a tanto, pero claramente se impone un análisis profundo de estas iniciativas y un replanteo para que los objetivos originales puedan alcanzarse. Por el bien de todos.


Interior competitivo: Para quienes vivimos en el AMBA (Area Metropolitana de Buenos Aires, esto es Capital y GBA) existe competencia en muchos servicios de telecomunicaciones, pero es realmente poco lo que hay en términos de telefonía básica o local. Sin embargo, en algunas localidades del interior, y de la mano de cooperativas no siempre telefónicas, están comenzando a surgir alternativas al servicio, dominado por Telecom o Telefónica, según la zona geográfica.

Un caso reciente es el acuerdo entre Coopelectric, la cooperativa de electricidad de Olavarría, quien firmó un acuerdo con Infracom para dar servicios de telecomunicaciones que abarcan a la telefonía local, acceso a Internet de banda ancha y, prometen, hasta TV. Además, aseguran que ofrecerán tarifas inferiores a las existentes en el mercado, con nuevas modalidades tarifarias tales como tarifa plana (entre abonados de la misma cooperativa), semiplana y otras variantes. Y no se trata del único caso. Ya hay movimiento en Darregueira y en Pehuajó, y pronto aseguran que habrá en Pergamino. Todo indica que la lista de cooperativas de electricidad interesadas está creciendo. ¿Será verdad entonces, como dice nuestro senador presidente, que el interior se está reactivando antes que el AMBA?


¿Segmentación?: Muchas veces la gente teme dejar sus datos en los sitios de Web por temor al uso que se le podría dar a éstos. La realidad marca que, en la mayoría de los caso, estos datos no pasan a la etapa de información, y sólo quedan ocupando espacio en algún disco rígido y no mucho más.

Tomemos el caso de Yahoo. Para usar sus servicios hace falta registrarse, ingresando datos como sexo, edad, lugar de residencia, etc. El argumento esgrimido es que esto permite, entre otras cosas, segmentar la publicidad que se va a ver. Hasta aquí, todo normal, previsible y lógico. Lo gracioso es chequear el mail en la Web y ver una publicidad que dice algo así como "llévese una PC por $ 450". Como el aviso dice $, no US$, y por más que uno no necesite cambiar de PC, la curiosidad hace que uno haga click en el mismo (mejorando la performance del aviso para el anunciante). Lamentablemente, se llega a un sitio en los EE.UU. donde se describe la PC pero leyendo un poco más se llega a un mensaje que dice: "Oferta disponible en USA continental". ¿Para eso indicamos en nuestro perfil en qué país vivimos?...


E pur si muove: A pesar de los duros tiempos que atraviesan los negocios vinculados a Internet, todavía se pueden observar sanas intenciones de mejorar los sitios en pos de una mejor experiencia de usuario. A nivel local, dos casos merecen ser destacados. Uno es el de Yahoo, que mejoró notablemente la interfaz de su aplicación de correo electrónico. El otro es el de Clarin.com, que no sólo mejoró su diseño y agregó interesantes producciones multimedia, sino que también se muestra como el más innovador en materia de publicidad online. Ojalá sea contagioso.


Hasta la vista, baby: Las devaluaciones de Argentina y ahora de Brasil se están convirtiendo en un verdadero dolor de cabeza para las empresas de hardware que no tienen mucho margen para responder al súbito encarecimiento de sus productos en moneda local. Esto está obligando a algunos a replantear su presencia en la zona, tal el caso de Acer, empresa que, según publicó El Cronista citando al diario brasileño Valor, decidió cerrar todas sus subsidiarias de América latina. Sólo mantendría en pie la oficina de México, de las siete que poseía en la región (incluyendo Brasil y Argentina). De confirmarse esta noticia, sólo nos queda decir hen kao hsing (mucho gusto en chino). ¿Seguirán otras?


Copywrong: Para quienes analizan el impacto de Internet en el derecho, se vienen días apasionantes por el juicio que las discográficas y otras empresas distribuidoras de productos protegidos por los derechos de autor llevan adelante contra Kazaa, el sucesor de Napster. El caso gira alrededor de dos puntos: quién es quien efectivamente viola los derechos de autor, y la territorialidad de aplicación de la ley.

En el primer punto, la gran diferencia entre Napster y Kazaa es que mientras el primero mantenía un directorio con el material disponible para download, el software del Kazaa permite que sus usuarios revisen directamente los directorios compartidos por otros usuarios mientras están conectados a Internet. Así, quienes violan las leyes de copyright son los usuarios, no el software ni Kazaa (punto obviamente discutido por los abogados).

En cuanto a la territorialidad, el tema es complejo. La empresa que desarrolló Kazaa, Sharman Networks, está registrada en Vanuatu, una nación insular del Pacífico Sur. La administración de la misma está en Australia y sus servidores en Dinamarca. Pero la empresa no posee activos en los EE.UU., lugar donde se presentó la demanda, con lo cual no están bajo la jurisdicción de sus leyes. Además, los abogados de la empresa sostienen que ya que Internet no reconoce fronteras nacionales, todo lo que dictamine la corte afectaría a usuarios de otros países.

Claramente, esta caso es más complejo que el de Napster, quien sí ofrecía directorios de material protegido por derechos de autor y que además era una empresa americana. El affaire Kazaa pone entonces en evidencia la falta de adaptación de la legislación a los desafíos que plantea Internet.


SMS (Sólo Medio Servicio): Los servicios de SMS (Short Message System o Sistema de Mensaje Corto) que convierten a los teléfonos móviles en pagers de doble vía no son nuevos. Y su popularidad es alta desde hace años en mercados como el europeo y el japonés, a punto tal que fue uno de los impulsores del delirio por las licencias 3G. En Argentina, si bien estos servicios están disponibles desde hace tiempo, recién ahora parecen estar despertando el interés real de los operadores, preocupados por la caída del consumo por línea. Así, están comenzando agresivas campañas de marketing que apuntan a captar el segmento más joven, principal usuario de estos servicios (quizás porque son los que mejor se bancan escribir con un teclado numérico). Pero todavía subsiste un pequeño detalle para que el servicio despegue: la interoperabilidad. Hoy, no se puede mandar un mensaje de un Movicom a un Personal, por ejemplo. Promover este servicio en estas condiciones es desconocer una de las características de la economía en red: cuanto más participantes haya en un ámbito, mayor será la motivación para entrar en la red. Sería mejor entonces que antes de invertir en promover el servicio, invirtieran en conectarse. La unión hace la fuerza.


Colombian way: En pleno furor puntocom, los responsables de Delivery.com afirmaban que sus operaciones en Colombia eran exitosas ya que debido a los altos índices de violencia de aquél país, la gente salía menos de su casa y entonces pedían que le entreguen diversos productos a domicilio. Si bien los índices de violencia locales no llegan (aún) a los niveles de los registrados en la tierra de García Márquez, no sería llamativo que este fenómeno se comenzara a dar también aquí.

Esto viene a cuenta del anuncio realizado por la cadena de comida rápida McDonalds, quien formalizó un acuerdo con Atento (el Call Center de Telefónica) para montar un negocio de entrega a domicilio de sus afamadas hamburguesas. Atento se ocupará no sólo de la atención telefónica sino también de la logística. Esperemos que la entrega sea rápida, porque no hay nada más feo que una hamburguesa fría (además, frías caen repesadas).