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CRONOLOGÍA DE LA INUNDACIÓN DE 1980

 


Clic para AmpliarLo que el agua se llevó

Era abril de 1980 y el mes había comenzado en Semana Santa. Tiempo de meditación y penitencia para los creyentes; también para el miniturismo. Que el trabajo, las distracciones y los rezos pueden comulgar juntos, como según la versión de José María Pemán en "El divino impacienté", aconsejaba nada menos que San Ignacio de Loyola a San Francisco Javier, cuando éste parte definitivamente para misionar en la India. No fueron pocos los olavarrienses que entre el miércoles 2 y el jueves 3 salieron hacia distintos rumbos del país. El clima benefició esos días, al punto que quienes llegaron a las zonas balnearias del Atlántico, hasta pudieron entrar al mar. Otros se entretienen de otra manera y habrá un vecino de Villa Gesell, que se alza con 63.000 "palos" en el Casino de Mar del Plata. No obstante, otros que descansaban en Villa Gesell igual estaban contentos, ya que la suerte de uno no es la de todos. Y llegó el domingo 6, celebración de las Pascuas de Resurrección, el alborozo de las Cristiandad y, por ser primer domingo de abril, Día de la Novia-. (el del novio no ha sido instituido; parece seguir para ellos el rol de eternos verseadores, algunos hasta capaces de superar a los mismísimos Bécquer, Espronceda, Byron y Keats, lo que no es poco decir).

Fue el último coletazo vacacional, tras un verano que se había despedido con una ola de calor tan demoledora como para que se suspendieran las clases el 20 y el 21 de marzo, luego que la actividad escolar se venía arrastrando, desde hacía días, de manera realmente intolerable.

Luego, la normalidad. Por esos últimos días de la semana final de abril, las noticias locales señalan la realización de una asamblea, numerosa y calificada; en la que se designó a la Comisión de Apoyo a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. Se anuncia que desde el 5 de mayo dejará de funcionar la Delegación Olavarría del Ministerio de Trabajo, por razones de reestructuración. En la guarnición militar es recordado San Jorge, patrono del arma de Caballería. Puesto el Regimiento de Tanques, es una consecuencia de la transformación de los hombres de a caballo en tropas blindadas; ya no desfilan con lanzas y montados los soldados del que fue originariamente -desde 1824, vísperas de la guerra con Brasil- Regimiento 2 de Caballería "Lanceros General Paz". El Club de leones celebra los 15 años de su fundación, y procede a la renovación de autoridades; llegan a Olavarría, para acompañarlos en el programa de actos, autoridades y socios de vecinas ciudades. Se espera la llegada, pero para el día 9, del ex-senador nacional radical, doctor Fernando de la Rúa, a invitación del Centro de Estudios "Ricardo Rojas". Pero seguramente los visitantes de esos días, que mayor atención demandaban eran los jugadores de Olimpo de Bahía Blanca, quienes llegaban para enfrentarse, en el estadio del Parque Carlos Guerrero con Estudiantes, ambos en pos del Campeonato Provincial de Fútbol. Olavarría toda hace suya la divisa "bataraza" y se dispone a alentar al equipo que, con solamente empatar, será campeón...

Se discute por esos días, en voz alta y el tema llega a los altos niveles del gobierno el "impuesto a la piedra": _Se van dando pronunciamientos. Muy claro es el del Centro Comercial Industrial en defensa del gravamen y proclama su confianza en que "las empresas, compenetradas de la responsabilidad social que debe asumir el capital creador en su relación con el medio del cual se nutren y del que extraen la riqueza -una relación ejemplarmente configurada por la trayectoria de don Alfredo Fortabat, cuya figura reverencia Olavarría- han de coincidir en una solución razonable que no altere bases que han sido pilares en el desarrollo del municipio local". El Intendente, doctor Carlos Víctor Portarrieu deberá estar el martes 29 en La Plata para participar en una reunión convocada por el Gobernador, con representantes de las empresas, para abordar el tema.

Clic para AmpliarMonseñor Manuel Marengo, Obispo de Azul, formula una exhortación pastoral ante la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones Sacerdotales y la Semana Diocesana Vocacional. El prelado está satisfecho por la labor y el concurso del reabierto Seminario Diocesano. Su llamado está especialmente destinado a los jóvenes, "la porción predilecta de la Iglesia y la más querida del Obispo. Jesús, mis queridos jóvenes, los invita a seguirle. Como en otro tiempo en Palestina. su tierra natal, su voz sigue resonando y diciéndoles: vengan conmigo y síganme' yo los haré pescadores de hombres..."

Estados Unidos acaba de fracasar en el intento de rescatar a los rehenes en Irán. Luego de los operativos exitosos de los judíos en Entebbe y de los alemanes en Mogadiscio, este desastroso episodio, por el cual el Presidente Cartes asume plena responsabilidad, provoca dispares reacciones y general preocupación en Occidente.

En la Argentina, la crisis financiera, estallada a fin de marzo con la liquidación del BIR (Banco de Intercambio Regional), continúa con otra drástica medida: la intervención de los bancos de los Andes, Internacional y Oddone. La medida se conoce el viernes 25 para evitar una estampida de inversores; pero la preocupación de los mismos se disipa con la resolución de elevar a 100 millones de pesos la garantía total a los depósitos. El llamado sector de "pequeños ahorristas", estimase oficialmente queda salvado.

Hay, empero, una noticia que convoca menos la atención de los olavarrienses: lluvias en la Provincia e inundación en la zona: hay corte de vías a la altura de la estación Pardo y en la cercana Cacharí se pasaron momentos de zozobra ante la irrupción de un torrente. Hay cientos de evacuados en el área central bonaerense. Por el desborde del Canal XIl se afecta la zona de Tapalqué, Rauch y Belloso. Esta última población está seriamente afectada por la altura de las aguas. Las comunicaciones son normales y, si bien el servicio ferroviario opta por el ramal de General Alvear para llegar a Olavarría, la ruta 3 está habilitada, sin dificultades...

Olavarría contaba hastas con noches estrelladas; luego el tiempo desmejoró; la noche del sábado 26 al domingo 27 llovió torrencialmente. Antes, por estación López, en el partido de Juárez, habían llovido 130 milímetros nada más que en seis horas. Por la zona de Sierra de la Ventana comienzan las dificultades y los trenes a Bahía Blanca optan por la vía la Madrid, dejando de lado la vía Pringles. Hacia el norte se señala el desplazamiento de las aguas rumbo a la bahía de Samborombón. Ya en Cacharí se advierte mejoría en la situación y se piensa en el regreso de los 260 refugiados que están en Azul, buena parte de ellos en `, galpones del Ferrocarril Roca y contando con la asistencia de la Cruz Roja y aprovisionamientos por la vía de la cocina volante del Regimiento de Tanques "Húsares de Pueyrredón".

La mañana del domingo 27 los madrugadores, especialmente los residentes en el área aledaña al Arroyo Tapalqué advirtieron la fuerte subidas de las aguas, además de incontenible, creciente. La expectativa no da para mucho, no deja margen. La voz de orden, impartida por la realidad, por la necesidad, no es otra que evacuar...

El doloroso éxodo de los olavarrienses comienza con los vecinos ribereños; prácticamente sin tiempo procuran salvar lo que es más elemental; pero nunca puede ser mucho. La invasión de las aguas apura el abandono de hogares, locales comerciales, etc. El arroyo crecido deja de ser un espectáculo para la curiosidad, por cuanto debe recordarse que era algo así antes de mediodía. Los numerosos fieles concurrentes a las iglesias de Monte Viggiano y del Colegio de Nuestra Señora del Rosario a la última misa de la mañana, puede decirse que fue el último grupo que se desplazó en masa por el Parque Mitre.

Pero en todo momento campeó el optimismo, la confianza... Esa frágil memoria de los argentinos -tan famosa- para los sucesos y las cosas, había dejado atrás no solamente la de julio de 1919, apenas si recordada por los mayores; sino también la de julio de 1955, que debía haber estado en la memoria de todos. Aunque, en rigor de verdad, la magnitud de la primera, hace 61 años, fue notoriamente superior, la invasión de las aguas fue extensa e intensa. La de hace 25 años fue algo más que una amenaza con el Tapalqué en los 3.40 metros y las aguas que así trepaban cubrieron sectores, a partir del Club Estudiantes, corrieron por la Avenida del Valle -que hacía muy pocos años había dejado un zanjón anegado no bien llovían unos milímetros, por lo cual se habían establecido un tipo de puentes levadizos para sortearlos- y obligaron a algunos retiros circunstanciales y sectoriales sin mayores daños. El despeje de las aguas, que había dejado sin funcionamiento la usina; obligó a trabajos intensos, hasta voladuras, efectuadas por el entonces 111 Destacamento de Zapadores.

Sesenta y un años son muchos, no obstante. De acuerdo a la tesis que abriga la aparición de una generación a cada quince años, eran cuatro las que habían pasado. Además, el Tapalqué, corre retozón por el medio de Olavarría, para que haya balnearios, parques, los famosos puentes colgantes que todo recién llegado quería conocer y ver si se animaba a transitar... Para que los chicos de antes urdieran fabulosas aventuras trepando en sus barrancas, para que los pescadores de siempre contaran con un entretenimiento más...
Sí que había crecido muchas, veces tanto como para lamer el viejo "puente de madera" de la calle Coronel Suárez; pero era como una travesura, casi una bravuconada, como para que se lo recordara algo más cuando había pasado la temporada estival y los bañistas desaparecen, los niños dejan de corretear por su vera y no hay quien vaya por sus peces por cuanto que nuestro frío y húmedo invierno no es conveniente para entretenimientos así.

Pero ese 27 de abril de 1980, seguramente a recordar mucho más y por muchas razones más, el Tapalqué se desbordó en magnitud. Los vecinos continuaban la retirada. Ya no eran solamente los de la avenida Brown, los de Vergara, Riobamba y Cerrito. También los de Lavalle y Alsina... Sin embargo "nadie creía" lo que estaba pasando. Hasta que no le pasaba... Vecinos mirando la fuga de quienes estaban a una cuadra nomás, en la confianza de que la suba iba a detenerse. Como al conjuro de Jehová cuando el éxodo de los judíos de Egipto se apartaron las aguas del Mar Rojo; algo así iba a pasar metros antes de la casa de cada uno...
¿Incredulidad? ¿Confianza? ¿Irresolución?. De todo un poco y también ese aferrarse a la casa, donde está la vida de uno y la de las generaciones de toda una familia en no pocos casos...

Cuando llegó la noche gran parte de la ciudad estaba cubierta; al día siguiente, la mañana dejó ver un lento retroceso que persistió. Pero, a la tarde del lunes 28, comenzó a llover copiosamente, llegó la noche y fue la más trágica por cuanto el martes 29 el aumento tenía niveles increíbles...
Para ese entonces ya estábamos solos, incomunicados. Solamente había aprovisionamiento de gas. El agua se había llevado todo. Era otra Olavarría la que se veía, la que estaba quedando...

Extractos de la Publicación "OLAVARRIA INCREIBLE", editada por Pedreira Publicidad con una tirada de 3000 ejemplares.

Los fragmentos que transcribimos en estas páginas son nuestro modesto homenaje a aquellos colegas que haciendo periodismo, escribieron lo que hoy es historia..