TALLER LITERARIO EN LA FACULTAD DE INGENIERIA

Alumnos virtuales del TALLER LITERARIO DE INGENIERIA, comenzamos a compartir por mail los ejercicios y encuentros que realizamos todos los martes desde las 19 en el Aula 6 de Electromecánica y donde los esperamos para poder vernos las caras. En el comienzo del año trabajamos con la idea de la "inversión o ensalada de fábulas". La idea es sacar a relucir la ironía, un valor literario importante y bastante escaso. Hay que considerar que la fábula se caracteriza por tener como personajes a animales que piensan y hablan. Y debe tener una moraleja moral, literaria o filosófica.
Antes de dejarlos con el texto que Ulises construyó sobre este ejercicio (basado en la inversión de un texto de Bioy Casares), les comunicamos que la novedad de este año es que tendremos una clase mensual de dramaturgia con Gladys Zambrini. La primera clase será el 26 de abril. Y la idea es armar textos para ser representados a fin de año en la Facultad. Nos vemos.
Guillermo Del Zotto

TALLER LITERARIO TP Nº1 – ABRIL 2005

La salvación – Adolfo Bioy Casares
Esta es una historia de tiempos y de reinos pretéritos. El escultor paseaba con el tirano por los jardines del palacio. Mas allá del laberinto para los extranjeros ilustres, en el extremo de la alameda de los filósofos decapitados, el escultor presento su ultima obra: una náyade que era una fuente. Mientras abundaba en explicaciones técnicas y disfrutaba de la embriaguez del triunfo, el artista advirtió en el hermoso rostro de su protector una sombra amenazadora. Comprendió su causa. “¿Como un ser tan ínfimo” -sin duda estaba pensando el tirano- “Es capaz de lo que yo, pastor de pueblos soy incapaz” Entonces un pájaro, que bebía de la fuente, huyó alborozado por el aire y el escultor discurrió la idea que lo salvaría “Por humildes que sean” –dijo indicando al pájaro- “hay que reconocer que vuelan mejor que nosotros”
Siendo un ave única, jamás fue admirada debido a su carencia de belleza. Ignorada, entregose a la misantropía, encontrando consuelo en la crueldad de un emperador para con artistas y filósofos. Una mañana observaba ansiosamente al tirano departir con un escultor, esperando su decapitación; cuando un bello espécimen alado levantó vuelo inspirando en el condenado la respuesta que le daría la salvación y fue perdonado por el emperador. Ofendida huyo, refugiándose en una isla lejana donde vivió ascéticamente sin levantar vuelo y murió instantes después de perder sus alas.